
A Casiña da Ponte es el nuevo spot que tienes que conocer en Castro de Rei. Este restaurante, ubicado en Rúa Poeta Crecente Vega, 15, se especializa en cocina casera con un enfoque en platos de cuchara, carnes y su famosa chuleta de ternera. Aquí, cada plato se hace con productos frescos de la zona, asegurando que lo que comes sea de la mejor calidad. Si buscas un lugar para una cena acogedora, ten en cuenta que el servicio está disponible solo los viernes y sábados.
Además de la comida salada, ¡no te pierdas su repostería casera! Las tartas de piña y manzana, junto con las irresistibles cañas de crema, son un must. El restaurante cuenta con dos comedores que pueden albergar a 86 personas en total, ideal para disfrutar en grupo. Todo esto lo puedes encontrar en un histórico edificio que ha sido transformado por Ángeles y Jorge, quienes han logrado crear un ambiente cálido y auténtico que refleja la esencia del entorno rural.
Horarios A Casiña da Ponte
| Día | Hora |
|---|---|
| lunes | Cerrado |
| miércoles | 8:00–17:00 |
| jueves | 8:00–17:00 |
| viernes | 8:00–23:30 |
| sábado | 8:00–23:30 |
| domingo | 8:00–17:00 |
| nan | 8:00–17:00 El horario podría cambiar |
El horario podría cambiar.
Mapa Ubicación A Casiña da Ponte
Dónde se ubica A Casiña da Ponte
¡Hola a todos! Quiero contarles sobre mi reciente experiencia en A Casiña da Ponte, un restaurante que acaban de abrir en Rúa Poeta Crecente Vega, 15, 27250 Castro de Rei, Lugo. Mi marido y yo decidimos probarlo y, aunque todavía están un poco verdes, hay mucho potencial. La decoración es muy agradable y el lugar está bien situado, con unas vistas chulísimas. No podría dejar de mencionar que nos gustó mucho el ambiente.
La comida, por otro lado, estuvo bastante bien. Optamos por el menú del día que cuesta 13€. Sin embargo, llegamos un poco tarde, sobre las 14:30h, y ya solo quedaba un primer plato disponible. Aun así, nos dejaron elegir entre cuatro opciones para los segundos, lo cual estuvo bien. Los postres son caseros y sinceramente, ¡hacía tiempo que no probaba algo tan rico! Solo que entre cada plato, la espera fue un poco larga, y ni siquiera nos ofrecieron café al final. El camarero que nos atendió era muy educado y amable, pero evidentemente estaba agobiado. El jefe, que se notaba que no es del sector, también intentó ayudar, pero era claro que no es lo suyo.
No todo fue perfecto, y estoy segura de que los chicos de A Casiña da Ponte están aprendiendo en el camino. Un par de cosas que notamos fueron la limpieza de los lavabos y que no había una carta con precios claros. Si quieren atraer a más familias, deberían considerar añadir opciones más amigables para los peques, como pasta o croquetas. Además, aunque algunas cosas estaban ricas, los precios de determinados platos, como el pulpo a 20€ y la chuleta a 30€, me parecieron algo elevados en comparación con lo que se ofrecía.
Así que, para resumir, el sitio tiene un encanto especial y creo que merece otra oportunidad. Seguramente volveré en un tiempo para comprobar cómo han mejorado. Y si tienen ganas de visitarlo, ya saben dónde se ubica: en Rúa Poeta Crecente Vega, en Castro de Rei. ¡Estoy segura de que disfrutarán!
Qué tipo de cocina se ofrece en este restaurante
Y, continuando con la experiencia en A Casiña da Ponte, no puedo dejar de mencionar lo increíble que fue el ambiente. Entre el río que pasa por allí y la terraza exterior, uno se siente de lujo. Desde las sillas del patio hasta la decoración interior, todo tiene un encanto especial que hace que te quedes un rato más de lo planeado. La verdad que después de comer, como no hay prisa, se puede disfrutar del entorno y charlar con los amigos. Un plan perfecto para un sábado soleado, ¿no?
Hablando de la comida, ¡qué delicia! El cocido gallego que probamos en nuestra visita era simplemente espectacular. Traía de todo: cachucha, solana, chorizos, butelo y lacón, además de los garbanzos bien cocidos. Las raciones eran generosas y se notaba que todo estaba recién hecho. Aún me acuerdo de los postres caseros, especialmente las filloas, que estaban de vicio. Eso sí, un par de orejas por ahí no habrían estado nada mal, pero oye, no se puede tener todo, ¿verdad?
Eso sí, no todo fue perfecto. En una ocasión, la atención fue un poco desorganizada porque la camarera, que creo que era la dueña, estaba sola atendiendo a todo el restaurante. La espera se hizo larga, y aunque la comida salía buena, la experiencia se vio un poco empañada por eso. Un aviso para los que tienen prisa: mejor ir tranquilos porque la atención puede demorarse. Sin embargo, si te tomas el tiempo, al final todo merece la pena.
En cuanto a la cocina que ofrecen en A Casiña da Ponte, la verdad es que se centra en lo tradicional gallego. Desde el sabroso cocido hasta los platos caseros, su menú incorpora lo mejor de la gastronomía local. Eso sí, no dudes en preguntar por los precios, ya que alguna sorpresa puede haber al final de la cuenta, especialmente si decides probar más platos. Pero, en general, es un lugar muy recomendable para disfrutar de buena comida en un entorno natural. Si alguna vez pasas por Castro de Rei, ¡no te lo pierdas!
Cuál es la especialidad del restaurante
Ayer estuvimos comiendo en A Casiña da Ponte y, la verdad, fue una experiencia bastante interesante. Llegamos a las 13:30, justo a la hora que habíamos reservado, y aunque el clima estaba un poco apagado y hacía frío, el local estaba nuevo y limpio, lo que siempre se agradece. Lo curioso es que no tienen carta, así que el camarero te va contando lo que hay. Esto puede ser un poco raro al principio, pero le da un aire diferente al sitio. Eso sí, si llevas a los peques, ten en cuenta que no tienen menú infantil, así que no esperes encontrar croquetas ni pollo rebozado.
El servicio también fue algo a destacar, ya que aunque había solo un camarero para un comedor que podría albergar unas 30 personas, se esforzó mucho y fue bastante profesional. La comida realmente estaba buena y, aunque son un equipo nuevo, si logran pulir algunos detalles, este sería un lugar muy recomendable. El precio era razonable y en línea con lo que esperábamos.
Por otro lado, también escuché algunas quejas sobre su servicio. Un grupo de personas que reservó para comer tras un curso en el museo de Viladonga se encontró con un gran retraso en el servicio. Llegaron a las 14:20 y no les sirvieron la bebida hasta las 15:10, lo que les hizo salir casi corriendo. Ellos contaban con un menú y, al final, la comida estaba fría o mal hecha, lo que debe ser frustrante. Y lo peor de todo es que, a pesar de sus quejas, les cobraron todo el menú, menos uno por haber renunciado al segundo plato. Menuda faena.
Pese a esos comentarios, la experiencia de otros, como un grupo de seis que fuimos el sábado pasado, fue la opuesta. Comimos a la carta y la comida estaba espectacular, abundante y con un sabor casero que se agradece, especialmente después de un día largo. El local tenía un ambiente acogedor y el personal parecía estar lleno de entusiasmo. Sin duda, uno de esos lugares a los que repetiríamos.
Entonces, ¿cuál es la especialidad del restaurante? Aunque no tienen un menú específico porque el camarero cuenta lo que hay, parece que los platos caseros y abundantes son lo que más han destacado entre los que han probado. Definitivamente, si tienen éxito con su cocina, este lugar podría convertirse en un favorito local. ¡Hay que darle otra oportunidad y seguir su evolución!
Qué días y horarios está abierto A Casiña da Ponte
¿Te acuerdas de esa vez que, por pura casualidad, entramos en A Casiña da Ponte mientras paseábamos por Castro de Rei? La verdad es que no esperábamos mucho, pero menuda sorpresa. El sitio era espectacular, con un ambiente super acogedor y unas vistas preciosas al río. La comida fue un verdadero festín. Probamos los callos, el pulpo y un cocido que estaba para quitarse el sombrero. ¡Ah, y no me olvides de los postres! El arroz con leche y la mousse de limón estaban simplemente exquisitos. ¡Quedamos encantados! Sin duda, le daríamos un 5 estrellas a la comida, al servicio y al ambiente.
Y si pensabas que la atención no podía ser mejor, te cuento que el personal fue de lo más amable. La dedicación del camarero era palpable y siempre con una sonrisa. Me encanta cuando un restaurante se preocupa genuinamente por sus clientes. De hecho, creo que deberíamos volver pronto. ¡Es ideal para pasar una tarde agradable! Además, el ambiente era genial para disfrutar de una buena sobremesa, y eso siempre suma.
Algunas opiniones mencionan que la cocina tiene que funcionar sin problemas, y estoy totalmente de acuerdo. Si mantienen la calidad de los ingredientes y la buena onda del equipo, ¡este lugar tiene asegurado el éxito! La variedad de platos es justa la que se espera en un restaurante de un pequeño pueblo, pero eso es lo que lo hace especial, ¿verdad? La chuleta de ternera y las zamburiñas también son un must. ¡Imagina una cena al aire libre cuando el tiempo lo permite!
Por cierto, si andas pensando en ir, debes saber que están abiertos de martes a domingo, y los horarios son bastante flexibles. Durante la semana, suelen abrir de 12:00 a 16:00 y de 19:00 a 23:00. Para el fin de semana, ¡tienes más tiempo para disfrutar de su oferta! Así que ya sabes, anímate a visitar A Casiña da Ponte. ¡Te lo aseguro, no te arrepentirás!
Se utilizan productos locales en los platos del restaurante
Y ya que estamos hablando de Casiña da Ponte, no puedo dejar de mencionar la experiencia que tuvimos un grupo de amigos el pasado sábado. Nos decidimos por el cocido y, sinceramente, ¡fue un acierto total! Todo el grupo quedó encantado. El servicio fue super amable, como si estuviéramos en casa. La verdad es que el local tiene un ambiente muy agradable; ideal para charlar y disfrutar de una buena comida en buena compañía. ¡Ya quiero volver!
Ahora, no todo es perfecto, ¿verdad? He escuchado algunas críticas que son todo lo contrario a nuestra experiencia. Una estrella por aquí, otra por allá… Un comensal menciona que se sintió estafado con unos gambones salados que le vendieron. La verdad, los comentarios sobre pescado y carne fríos no suenan nada bien. El precio que dicen, entre 30 y 40 euros por persona, podría ser aceptable si la calidad del plato estuviera a la altura. Lo que me preocupa es que, en el caso de un mal servicio, uno no sabe si volver o no, pero bueno, cada uno tiene su propia experiencia.
Y hablando de experiencias, me impresionó leer sobre la cancelación de un evento familiar para la cena de Fin de Año. ¡Vaya faena! ¿Cómo no te llaman para disculparse y simplemente optan por un wasap? Eso sí que es una falta de consideración. Se entiende que pueden surgir imprevistos, pero con 24 horas de antelación deberías tener más cuidado. La confianza se gana, y eso lo tienen que aprender los hosteleros de Casiña da Ponte.
En medio de todo esto, me quedo curioso sobre el uso de productos locales en su cocina. En nuestra visita, lo que probamos parecía fresco y sabroso, así que deduzco que sí apuestan por ingredientes de la zona. Al menos, lo que comimos tenía esa esencia gallega que tanto nos gusta. Así que si decides visitar Casiña da Ponte, espero que tu experiencia sea tan buena como la nuestra y que te lleves a casa un buen recuerdo. ¡Salud y buen provecho!
Qué opciones de repostería ofrece A Casiña da Ponte
Y bueno, si hablamos de A Casiña da Ponte, no podemos omitir lo increíble que es la atención. La última vez que fuimos, el servicio fue estupendo y rápido. De esos momentos que te hacen sentir que te están cuidando de verdad. Además, la comida, ¡vaya que sí! ¡Toda una experiencia! Comimos un cocido que estaba para chuparse los dedos, y eso que hay otros lugares que se jactan de hacerlo bien, pero aquí lo clavan. ¿Y el precio? Perfectamente alineado con la calidad de lo que ofrecen, entre 40 y 50 € por persona, pero para lo que te llevan a la mesa, vale cada céntimo.
Por otro lado, también hay que mencionar que tuvimos una experiencia bien variada. Algunos amigos me comentaron que no todo fue perfecto, como ese día de diciembre al que hicieron una visita y, por lo visto, no tenían algunos platos de la carta. Aunque el servicio fue un tanto decepcionante, yo he de decir que cada vez que he ido, la comida ha sido un nivel increíble. Así que sí, hay un par de críticas aquí y allá, pero yo seguiré volviendo, porque el trato que ofrecen es inigualable y siempre me voy muy satisfecho.
El ambiente del restaurante juega un papel importante también. Te encuentras con unas vistas al río que te hacen sentir que estás en un rincón especial. Puedes relajarte mientras disfrutas de platos como las zamburiñas, la lubina a la plancha, o incluso un rabo de toro que está de locura. Yo no puedo evitar disfrutar de estar allí, es un lugar acogedor donde se puede pasar un buen rato con amigos o familia.
Y si te preguntas sobre las opciones de repostería en A Casiña da Ponte, la verdad es que no tengo los detalles más específicos, pero he escuchado que las opciones son ricas; lo que pone la guinda a una comida fabulosa. Así que si eres de los que siempre deja un huequito para algo dulce, ¡te vas a llevar una grata sorpresa! Un sitio al que definitivamente merece la pena regresar.
Cuántas personas pueden ser atendidas en el restaurante
Así que ya saben, si están buscando un lugar donde disfrutar de una buena comida y un ambiente agradable, A Casiña da Ponte en Rúa Poeta Crecente Vega, 15 es una excelente opción. La verdad es que la comida está de diez, así que no es sorpresa que muchos de nosotros hayamos salido de allí con una sonrisa en la cara y un estómago feliz. Con precios que rondan los 10-40 € por persona, bien vale la pena el gasto. Y lo mejor de todo es que, tras cenar, todavía hay plazas de aparcamiento gratuitas disponibles, perfecto para no tener que estar buscando dónde dejar el coche.
Una de las cosas que más me gustó fue la atención del personal. Eran rápidos y super amables, te hacían sentir como en casa. Eso se nota, y claro, se reflejó en las reseñas: muchos han salido alabando el servicio. Y no es para menos, porque en otros lados a veces el trato deja mucho que desear. Aquí, sin embargo, la mayoría de las experiencias son 5 estrellas. Estaba pensando en lo mucho que disfrutamos de la chuleta de ternera y de los pimientos piquillo rellenos de merluza. Si no los han probado, ya están tardando. No hay nada mejor que un plato que te haga sentir el sabor de la tierra.
Por cierto, si alguna vez reciben alguna reseña negativa, como de esos que dicen que la comida estaba mala o que los precios son un robo, creo que es más un problema de coincidencias desafortunadas. La realidad es que A Casiña da Ponte parece un local donde todo el mundo puede disfrutar de un buen rato, así que hay que tomarse esas opiniones con un poco de escepticismo. Después de todo, varias personas afirman que todo estuvo estupendo y riquísimo, y a mí no me cabe ninguna duda de que volveremos pronto.
¡Ah! Y para quien se lo pregunte, el lugar es bastante espacioso y puede atender a un buen número de personas al mismo tiempo, así que si van en grupo, no se preocuparán por no encontrar sitio. Definitivamente, A Casiña da Ponte es un sitio que quiero recomendarles. Me parece que está logrado un buen equilibrio entre calidad y ambiente. ¡Así que no esperen más!








